LA HISTORIA DEL CEPILLO DENTAL
Recientemente, en la revista de “El Dentista del siglo XXI” (nº20, junio 2011) he leído un artículo muy interesante y curioso escrito por Antolín de la Torre Cortés que me gustaría resumíroslo, trata de la evolución a lo largo de la historia del cepillo de dientes.
La historia de este sencillo pero fundamental utensilio es muy antigua. Muy posiblemente sólo haya un invento más antiguo que el cepillo dental: la rueda. Se tiene creencia que ya en el Paleolítico, nuestros ancestros se preocupaban por el cuidado de sus dentaduras masticando palitos o varitas de distintas hierbas medicinales. Las primeras noticias que se tienen del cepillo de dientes se remontan a 4000 años antes del nacimiento de Cristo. Consistía en un palillo con forma de escobilla en uno de los extremos.
En Grecia, Plinio el Joven recomendaba en sus escritos utilizar el cañón de una pluma de buitre para limpiar los dientes, aunque a veces podía producir mal aliento, por lo que a él le gustaba más emplear en su lugar una púa de puerco espín.
La primera “revolución” del cepillo dental moderno con la forma que hoy conocemos, fue de China. Se fabricó con cerdas de porcino durante la Dinastía Tang (618-907 d.c).
En 1780, William Adds fabricó el primer cepillo dental eficaz, que tenía un mango de hueso de vaca y cerdas naturales de porcino. A principios de 1900, el celuloide empezó a sustituir al hueso.
En 1938 apareció el llamado “cepillo milagro” del Dr. West, que estaba elaborado con púas de seda y permitía una perfecta higiene bucal. Un año más tarde Du Pont introdujo las cerdas de nailón.
En la actualidad, hay muchísimos tipos de cepillos dentales disponibles en el mercado. Cuando creíamos que ya estaba todo inventado, aparece el nuevo cepillo dental del siglo XXI, los llamados cepillos iónicos, que crean las condiciones necesarias para la atracción iónica de la placa bacteriana por la saliva, a la que carga negativamente. Están formados por una barrita de dióxido de titanio, como prolongación de l mango, y un cabezal de cerdas. Este cepillo sólo necesita de cualquier fuente de luz para funcionar. No necesita ni pilas, ni cables eléctricos, ni tan si quiera pasta de dientes por lo que también el uso del agua se reduce al mínimo, y las cerdas son reemplazables. ¡Todo un descubrimiento!
En la CLINICA DENTAL OLIVARES en Albacete te asesoramos sobre cual es el cepillo dental que necesitas y haremos hincapié en enseñarte a manejar correctamente el cepillo dental que es la única arma para luchar contra la temida placa bacteriana que provoca la caries y la inflamación en las encías. Además si pides cita para una limpieza dental, te obsequiaremos con un kit de higiene oral, que consta de una pasta dental para uso diario y un cepillo dental.
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